Autoexamen de senos
¿Qué es un autoexamen de senos?
Un autoexamen de senos, también conocido como autoexploración, es una herramienta de detección temprana que consiste en observar y palpar tus senos para identificar cualquier cambio o síntoma que pueda estar relacionado con el cáncer de mama.
El objetivo es que te familiarices con cómo se ven y se sienten tus senos normalmente para que puedas notar cualquier cambio, como un bulto nuevo, cambios en la piel o en los pezones. Si encuentras algo diferente durante el autoexamen, es importante informárselo de inmediato a tu médico.
Aunque el autoexamen es una herramienta útil para la detección temprana del cáncer de mama, no debe reemplazar las mamografías y exámenes clínicos de senos regulares.
¿Con qué frecuencia se debe realizar un autoexamen de senos?
Se recomienda que las mujeres adultas de todas las edades se realicen un autoexamen de senos al menos una vez al mes.

Para las mujeres que aún menstrúan, lo ideal es hacerlo entre 7 y 10 días después del primer día de su periodo. Para quienes ya están en la menopausia, se recomienda elegir un mismo día cada mes, por ejemplo, el día 1 o el día 15.
Guía de 3 pasos para la detección temprana
El cáncer de mama no siempre se puede prevenir, pero hay tres pasos clave que puedes seguir para detectarlo a tiempo. Esta guía gratuita puede ayudarte a encontrarlo antes de que se propague.
Consigue la Guía gratuita¿Cómo realizar un autoexamen de senos?
Hay tres pasos necesarios para realizar un autoexamen de mamas completo. Cada uno de estos pasos debe completarse cada vez que se realice un autoexamen de mamas.
1) Examen en la ducha
Coloca tu mano derecha, con la palma plana, en la parte de atrás de tu cabeza. Con las yemas de los tres dedos centrales de tu mano izquierda (índice, medio y anular), revisa todo tu seno derecho y el área de la axila. Presiona suavemente al principio y luego con más firmeza para detectar bultos o cualquier cambio.
Después, cambia de lado y repite el proceso, usando tu mano derecha para revisar tu seno izquierdo y el área de la axila.
2) Examen frente al espejo
Párate con las manos en la cintura y observa en el espejo si notas algún cambio en la textura, forma, tamaño o apariencia de los senos, así como en el pezón o si hay alguna secreción inusual.
3) Examen acostada
Acuéstate con una almohada pequeña o una toalla doblada bajo tu hombro izquierdo y coloca la mano izquierda detrás de tu cabeza.
Usa tu mano derecha para revisar tu seno izquierdo y bajo la axila. Mueve la almohada bajo tu hombro derecho. Cambia la posición de los brazos y repite el proceso usando tu mano izquierda para revisar tu seno derecho.
Recuerda hacer tu autoexamen regularmente y comunicar cualquier cambio que notes a tu médico.